Para avivar la pasión en una relación lo mejor es investigar y llevar nuevas técnicas a la cama, por eso te explicamos que es el BDSM y la mejor forma de incluirlo en tu nido de amor.
Esta práctica se ha puesto mucho de moda gracias a su aparición en películas y libros de gran éxito, pero en realidad existe desde hace muchos años.
El BDSM se puede traducir en sus siglas como Bondage, Disciplina y Dominación, Sumisión, Sadismo y Masoquismo; una rama del sexo que estaba catalogada como tema tabú.
Asimismo, en ella se utilizan ataduras para mantener sumisa a la otra persona, haciendo uso de materiales como cuerdas, esposas, lazos, corbatas, cintas o cualquier otro objeto que sea capaz de inmovilizar.
Puntos importantes
Para que esta práctica se pueda efectuar de manera respetuosa, lo ideal es que sea consensuado. Lo primordial es tomar en cuenta la opinión de ambos para que se disfrute por completo.
Su inclusión no conoce de géneros, ni preferencias sexuales, más bien de roles. Pueden existir mujeres u hombres sumisos.
Ideas de placer
Existen una serie de cosas que puedes tomar prestadas de esta entretenida forma de sexo para ponerle picante a la relación de pareja y te decimos cuáles son las más indicadas
Un tip que debes conocer es que no es necesario gastar millones en los “juguetes”, ya que puedes usar lo que tengas en casa.
1.- Cuerda de nylon
La puedes encontrar en cualquier ferretería, además es cómoda y accesible para tu bolsillo.
2.- Privación sensorial
Es limitar a la persona sumisa de uno o más de sus sentidos para que centre toda su atención en las sensaciones que está experimentando su cuerpo.
Puedes vendar con una bufanda, colocar audífonos con música erótica o comprar tapones para los oídos, de esta manera se incrementarán sus niveles de excitación.
3.- Sensorama
Una vez que tengas a la persona atada, puedes comenzar a jugar con la sensibilidad de su piel. Prueba variando temperaturas con cera caliente o hielos.
4.- ¡Te portaste mal!
Utiliza tu mano o un cinturón para mostrarle quien manda.
5.- Flogger casero
Puedes ir a la tienda de telas y comprar un pedazo de semicuero, una herramienta que aunque no lo creas da mucho placer.
Corten pequeñas tiras de unos 3 o 4 cm, como si estuvieran haciendo una falda hawaiana y enróllalo en un pedazo de madera de unos 10 u 15 cm (este será el mango) peguen todo con cinta de aislar, y voila. ¡Hola diversión!
Finalmente, te recordamos que cualquier práctica sexual debe de ser basada en el respeto y en el amor.