Hoy en día uno de las principales consecuencias que suceden debido al alto nivel estrés y al ritmo de vida acelerado es la dificultad para tener un buen sueño. Desde el insomnio o el síndrome de las piernas inquietas son varios los trastornos que suceden debido a una exigente rutina diaria.
Otras de las afecciones que se conocen hoy en día es la sexsomnia, que aunque no es muy común cada vez son más los casos que aparecen.
La periodista, Morgan Mandriota describe lo que siente padecer de sexsomnia: “Ocurre al menos tres veces a la semana: me despierto y me descubro masturbándome, al borde de un orgasmo. Siempre acabo y luego me vuelvo a quedar dormida. Suena genial, ¿no? Pues no lo es”.
La sexsomnia es un trastorno del sueño en el cual las personas tienen relaciones sexuales o se masturban mientras están dormidos. Esto puede generar un daño físico y también desde el punto psicológico generar una frustración emocional.
Según describen los especialistas en los hombres suele manifestarse en la intención de tener relaciones sexuales con su pareja, mientras que en las mujeres se tiende a la masturbación.
“Nunca he tratado de tener relaciones sexuales con mi pareja mientras dormía pero aún recuerdo haber despertado a toda la familia de un amigo hace unos años, debido a mis fuertes gemidos”, describe la periodista.
La sexsomnia se encuentra dentro del tipo de trastornos categorizados como parasomnias, las cuales son actividades disruptivas, anormales y habituales que ocurren entre y durante las etapas del sueño profundo.
Un estudio del año 2017 publicado en la revista ‘Sleep‘, sostiene que este trastornos suele darse más frecuentemente en hombre que mujeres. Allí también se expreso que estos comportamientos suelen ser amnesicos por lo que la persona no recuerda haberlos hecho. Reseña la web Salud360
Los factores que desencadenan esta anomalía pueden ser consumir demasiado líquido, beber cafeína, sentimientos de ansiedad o estrés. Para su tratamiento se suelen recetar psicofarmacos que ayuden a mantener el sueño.