La directora de un jardín de infantes en Shenzen, China, fue despedida recientemente luego de que se difundieran varios videos de niños de tan solo tres años participando de un acto de bienvenida brindado por bailarinas de caño (Pole Dance), con muy escasa ropa.

El primer lunes de septiembre marca el comienzo de un nuevo año escolar en China, y muchas instituciones organizan celebraciones especiales para conmemorar el evento. El jardín de infantes de Xinshahui en Shenzhen no fue diferente, pero los padres de los aproximadamente 500 niños de entre tres y seis años que se inscribieron allí, no esperaban que la ceremonia incluyera bailarinas de caño (Pole Dance) que giraban provocativamente en un poste de metal, con una bandera china flameando encima.

Cerca de 100 padres asistieron a la extraña ceremonia, muchos de los cuales se declararon indignados por la actuación de las bailarinas de caño (Pole Dance). La directora del jardín de infancia, Lai Rong, tenía una explicación muy simple para su elección: algunos de los padres habían expresado el deseo de que sus hijos “aprendieran un nuevo tipo de danza” y ella había seleccionado a las bailarinas de caño (Pole Dance) por sus “excelentes habilidades”. Lo cual tiene mucho sentido…

Aparentemente, esta no es la primera decisión cuestionable de la directora Rong, al menos según el periodista Michael Standaert, cuyo hijo está inscrito en el jardín de infantes de Xinshahui:

“Antes de que nuestros hijos salieran de la guardería durante el verano, hubo 10 días de ‘actividades’ militares y exhibiciones de ametralladoras y morteros en la puerta; ahora la directora les ha dado la bienvenida con un baile de striptease”, escribió Standaert en un tuit, agregando “Se ha vuelto loca”.

El buró de educación local inició una investigación sobre la bizarra ceremonia, y descubrió que se había invitado a un grupo de pole dance a actuar en el jardín de infantes. En una declaración oficial, la oficina dijo que “realizar bailes de caño (Pole Dance) para niños de jardín no es apropiado”.

Muchos de los niños se sentían obviamente incómodos al ver bailar a una atlética bailarina escasamente vestida en el patio de su jardín de infantes, y la controversia sobre el evento llevó al despido de la directora Rong.