Hay una razón por la que el Casio F-91W sigue fabricándose 30 años después de su lanzamiento: es simple, es fiable y es resistente al agua. Pero no solo al agua.
Un usuario en Internet ha decidido poner a prueba la resistencia del mítico reloj de Casio cocinando una tortilla francesa con el reloj como ingrediente.
“Primero lo congelé y aguantó sin problema”, escribió Meloncín en un hilo con más de 390 respuestas, y aportó este vídeo del F-91W en hielo como prueba:
“Había pensado en lo de hervirlo, pero eso ya se ha visto alguna vez. Y lo de freírlo directamente, igual es demasiado fuerte. Pero… ¿y hacer una tortilla francesa con relojes?”, dijo Meloncín. Y se puso manos a la obra.
Tras pasar por la sartén, el reloj parece estar en las últimas. El segundero sigue avanzando, pero no se distingue lo que pone en la pantalla:
“No daba un centavo por él, pero sigue funcionando”, dice Meloncín. Siguiente prueba: la lavadora. Un lavado de dos horas y media a 90 grados con detergente y suavizante, aprovechando para lavar también la colcha del perro.
Hay más fotos en Forocoches, pero el resumen es que el Casio F-91W sigue aguantando. “Estoy por llamar a los de Casio y preguntarles qué sentido tiene un G-Shock de 100 euros si con éste de 9 euros ya aguanta de todo”, comenta Meloncín. El autor del hilo decidió sumergir el reloj en lejía después de fracasar con la prueba de la lavadora. (El Casio lleva un día en lejía y todavía funciona).