Por eso, en ese hilo de relaciones tóxicas que habitan en la vida, podemos intentar que, al menos, nuestra relación de pareja sea mentalmente sana.

Cada persona debe respetar el espacio del otro

Fundamental, e innegociable.

Si controlas cada uno de los minutos y los segundos de la vida de tu pareja, simplemente por inseguridad, o si él o ella lo hace contigo, esto no está siendo mentalmente sano, y tarde o temprano explotará.

Siempre y en todo lugar hay que respetar la vida del otro, manteniendo por supuesto un espacio común para estar juntos y mantener la relación sana, además de feliz.

No hay que ridiculizar al otro, jamás

Es algo que no hay que hacer en privado, y mucho menos en público.
Sacar defectos, ridiculizar, reírse de la otra persona…

No es negociable tampoco esta situación, y poco a poco hará que uno de los dos se canse.

Celos

Aquellos que decían que “si tiene celos, es porque te quiere”, estaba muy, pero que muy equivocado.

Los celos no son más que la inseguridad de perder al ser amado, pero pueden llevarnos a hacer verdaderas barbaridades.

Jamás estarán justificados por una u otra parte, porque si alguien da ‘motivos’ al otro, tiene que haber una conversación, no una mala acción.

Hay que esforzarse cada día

Evidentemente, si formas una relación de pareja con alguien, no estás pensando en que se vaya a acabar, pero no está de más no olvidar ese dicho de que ‘nada es para siempre’, por lo que hay que esforzarse, para que todo sea sano.